Ribera del Fresno


Creditos:  Ayuntamiento de Ribera del Fresno
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Vista aerea de Ribera del Fresno.




Historia de Ribera del Fresno


Existen restos arqueológicos que remontan su origen a la época prerromana (s II a.c.- I d.c.). Así lo constata el Oppidum de Hornachuelos (posiblemente la antigua Fornacis que menciona Ptolomeo). Al igual que la localización en su término de la ceca túrdula de Balleia.

Asimismo, la presencia de restos visigodos en la zona hace pensar en probables asentamientos, remontándonos al siglo V.

Sobre legendarios antecedentes no documentados, bajo el dominio árabe, aparece nombrado ya como centro poblado.

Fue repoblada en el siglo XIII por la Orden de la Caballería de Santiago. Se le denominará, desde entonces, como Ribera, de la Orden de Santiago, Partido de Llerena y provincia de León (sede de la Orden). La primera referencia escrita data de 1257, en la cesión de terrenos al priorato de San Marcos de León, para la fundación por carta de Puebla del Prior. A partir del siglo XIII viene nombrada en los documentos como Ribera del Fresno.

Según la tradición su nombre se atribuye a una gran fresno existente a orillas del Arroyo Valdemedel, donde se asienta la población.


 
En la actualidad, Ribera del Fresno obedece a una importante reestructuración urbanística llevada a cabo durante los Siglos XVII y XVIII en donde destaca la típica arquitectura popular de Tierra de Barros plasmada en las casas blancas encaladas cuyas fachadas se muestran adornadas de hermosas rejas y balcones. Igualmente son reseñables las grandes mansiones señoriales con seductoras fachadas barrocas en las que llama la atención el protagonismo de sus elaboradas portadas, balconadas, áticos y blasones, alguno de los cuales pertenecientes al Siglo XVI. Entre ellas cabe mencionar la de los Ojeda, Aparicio, Grajera, Olea y otras correspondientes a la antigua hidalguía y nobleza local, que proliferan en las Calles Cura, San Juan Macías, Coso y otras. Señalamos la Casa de la Cultura, una de las mejores casa-palacio de la localidad donada en 1991 por Don Jose María Vargas-Zúñiga . Este soberbio edificio refleja el arte y cultura del siglo XVIII. También el Palacio de Quintanilla ubicado en la Calle Ayuntamiento. Este edificio del Siglo XVI al XIX, mantiene toda su estructura destacando su fachada barroca.

Además, la Calle Larga fue cuna de uno de los escritores más importantes de la Literatura Española del Siglo XVIII: Don Juan Meléndez Valdés (1754-1817) que pasó toda su infancia en la localidad ribereña. Este personaje cumbre en el Siglo de las Luces o Ilustración destaca por su actuación comprometida en la España de la época, intentando cambiar los ideales en los que descansaba el Antiguo Régimen y aplicar unos pensamientos liberales y progresistas. Para lograr esta quimera se convirtió en político y magistrado lo que le acarreó su destierro en Francia donde murió en 1817.

El año 2004 se celebró el 250 aniversario del nacimiento del escritor de Ribera del Fresno.

Una vez realizada una breve descripción acerca de la arquitectura civil cabe reseñar los importantes monumentos religiosos existentes en la zona. Entre ellos, la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de Gracia, situada en la Calle Iglesia número 2, y original del Siglo XIV, ampliada en el Siglo XV y reedificada sucesivamente en 1745 y 1859. Como característica singular presenta dos torres gemelas en la fachada delantera que se orienta, peculiarmente, de forma contraria al caserío. En la parroquia se encuentran la escultura de estilo románico-gótico de la Virgen del Valle, patrona del pueblo, que denota la característica típica de este estilo como es la Virgen sentada con el niño, vestido como rey. Igualmente hay que mencionar del maestro barroco de la Escuela Sevillana Martínez Montañés, uno de los Cristos que aparecen en la parroquia. También dentro del estilo escultórico hay que referirse a los retablos y en la Iglesia Parroquial se conserva uno realizado por Alonso Rodríguez Lucas de estilo barroco de finales del Siglo XVII.


En cuanto a las ermitas podemos destacar en el municipio las Ermitas de la Aurora, la ermita del Cristo de la Misericordia, la del Cristo Viejo o la dedicada al San Juan Macías.
La primera se ubica en la Calle Meléndez Valdés, en pleno centro, pudiendo destacar de la misma un retablo de estilo barroco con la escultura, del mismo estilo, de la Virgen de la Aurora portando en la mano izquierda un libro y en la derecha una lanza.

La ermita del Cristo de la Misericordia, patrón del pueblo, es una composición arquitectónica del Siglo XVIII en donde hay que señalar la escultura del Cristo de la Misericordia del famoso escultor de la Escuela Sevillana barroca Pedro Roldán intentando plasmar en sus tallas el mayor realismo y sufrimiento, lográndolo en la figura del Cristo Muerto en la cruz tapado con un paño sobre sus caderas.




Por lo que respecta a la Ermita del Cristo Viejo, ubicado en lo que actualmente se denomina Calle Príncipe de Asturias y en visible estado de ruinas, hay comentar que fue levantada en el Siglo XVI sobre otra anterior conservándose la cúpula de la cabecera y una torre de peculiar remate bulboso que se asemeja a la Iglesia de la Coronada del pueblo cercano de Villafranca de los Barros.

Por último, en 1985 se inaugura la Ermita de San Juan Macías, dedicada al fraile dominico de Ribera del Fresno que fue canonizado en 1975. La Capilla fue levantada en la misma casa donde nació el Santo. Además, dedicado al santo se erigió el Pozo de San Juan Macías en la denominada finca del Valle Garzón, en el término municipal ribereño. Se escogió el lugar debido a la peculiaridad de que fue en este terreno donde se produjo el primer milagro del santo.




Visita por Ribera del Fresno





Cuando en 1791 Don Juan José de Alfranca y Castellote, visitador general, viene a nuestro pueblo, en su informe, entre otras, escribe estas palabras: “Las casas son de regular construcción y entre ellas quatro o cinco de mui buena arquitectura y disposición interna, superiores a todas las de los pueblos del Partido de Llerena, inclusa la capital”. Nuestras amplias calles con hermosos edificios tanto civiles como religiosos, privados o públicos, son un buen lugar para pasear y recrearse, ya sea con el sabor popular de la cal blanca y rejas negras, como con el sabor nobiliario de hermosas fachadas con blasones.



Son a destacar, entre otras no menos sigulares:

Casa de Vargas-Zúñiga: Perteneció en el siglo XVII a la familia de Don Fernando Brito Lobo. Impresiona su enorme fachada, su gran balcón y escudo con venera. Sus rejas llevan la Cruz de Santiago. Fue cedida al ayuntamiento por los herederos de la familia Vargas-Zúñiga, y actualmente es la Casa de la Cultura. En ella se encuentra la Biblioteca Pública, el Centro de Interpretación “Cerro de Hornachuelos” y un Centro Etnográfico sobre las Almazaras.

Casa de Bazo: Destaca en esta fachada su balcón con bóveda en forma de venera. Hoy está restaurada como Posada.

Palacio de Quintanilla: Construida en el siglo XV fue reconstruida a finales del siglo XVII. Comprende un rincón pintoresco en la calle Ayuntamiento.

Casa de los Olea y Casa de los Grajera: Las dos pertenecientes a familias con poder municipal en los siglos XVII y XVIII. Los dos de esquina, blasonadas y con puerta trasera lateral.

Antiguo Convento de Jesús y María, hoy Ayuntamiento: Hasta principios del siglo XVIII nos consta por documentación que tuvo profesión 20 monjas, y en él se impartió enseñanza privada.

Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de Gracia: Obra originaria del siglo XIII, fue ampliada en época de los Reyes Católicos y reedificada en 1745 y 1859, según consta en inscripciones hoy ya desaparecidas, mencionadas por distintas fuentes. Construcción de amplias proporciones, realizada en mampostería encalada, en cuyo escudo podemos ver la Cruz de Santiago. En su interior conserva un notable retablo barroco de fines del siglo XVII realizado por Alonso Rodríguez Lucas.

En ella se encuentra la imagen de Nuestra Señora de Gracia, escultura de estilo gótico, y la imagen de la Virgen del Valle, de estilo protogótico.

No debemos olvidarnos de su púlpito hecho con mármol de Estremoz, ni de la Cruz Procesional realizada en plata sobredorada, obra de Juan de Aldana, platero vecino de Llerena. Hoy en día esta iglesia es zona ZEPA de cernícalos.

Ermita del Cristo de la Misericordia: Obra del siglo XVIII de atractiva composición arquitectónica. Se trata de edificación con atrio delantero, arcada lateral y torre con elegante remate. Posee una escultura del Cristo de la Misericordia del famoso escultor de la Escuela Sevillana Pedro Roldán.

Ermita de la Aurora:
Su fachada se singulariza por su somero hastial coronado con pequeña espadaña. En su interior se halla la Sillería de los Trece de la Orden de Santiago. En el umbral de la entrada se aprecian piedras visigóticas.

Ermita del Cristo Viejo: De sus restos se conservan la cúpula de la cabecera y una torre de peculiar remate bulboso.

Ermita de San Juan Macías: Construida en 1985 en ha casa donde nació el santo.



Ermita de San Isidro: Construcción de 1998 levantada a 4 Km. de la población.

En el nombre de sus calles queda recuerdo de lo que fue:

Calle Hospital: En esta calle se ubicaba el Hospital de San Juan.

Calle de la Cruz: Hace alusión a la Cruz que había al final de la calle.
Calle del Castillo: Castillo perteneciente a la Encomienda de Santiago, que mandó a construir en el siglo XV Martín de Tordesillas. Las casas de la Encomienda se encontraban en la calle de los Ricos (actual Calle ayuntamiento).  


San Juan Macías 


Imagen de San Juan Macías que se encuentra en la Basílica del Santisimo Rosario en Lima- Perú.

Juan de Arcaz Sánchez, San Juan Macías, nace en Ribera del Fresno en 1.585. A los cuatro años de edad queda huérfano habiendo muerto sus padres, Don Pedro de Arcaz e Inés Sánchez, víctimas de las epidemias del tifus y de la viruela; quedándose éste bajo la tutela de sus tíos.

Sus tíos carecían de recursos económicos para sustentar y educar a Juan por lo que se introduce al oficio de pastor en una hacienda de un terrateniente extremeño.

Su niñez está marcada por una educación de especial devoción a la Virgen María, particularmente mediante el rezo del Rosario, que unido a las horas pasadas en la soledad del pastoreo adquirirían hábitos contemplativos.

A los veinte años de edad toma la decisión de emigrar de Ribera del Fresno para buscar mejores condiciones de vida. El primer lugar donde se asienta es Sevilla donde se puso a trabajar como pastor a las órdenes de un rico ganadero andaluz. Tras Sevilla se dirige a Jerez de la Frontera, sintiéndose incómodo, al igual que ocurriera en Sevilla. En Jerez de la Frontera hizo amistad con un marinero y rico negociante con quien se puso a trabajar como criado. Ambos regresaron nuevamente a Sevilla donde arreglaron todos los papeles en la Casa de Contratación para embarcar al Nuevo Mundo llegando a Cartagena de Indias (Colombia) y más tarde a Lima. En esta última ciudad, cuando contaba con 37 años de edad, ingresa en la Orden de los Dominicos en el Convento de Santa María Magdalena porque veía que allí podía cooperar con los dominicos en su misión apostólica y en la promoción humana de los pobres.

Fue portero del convento durante veinticinco años desde donde practica una importante obra de beneficencia espiritual y material; además de tener un gran influjo en la ciudad gracias a sus consejos. Por lo que aquella portería de la Magdalena se convertiría en un lugar de comunión y participación de pobres y enfermos.

Sesenta años de edad contaba fray Juan Macías cuando le visitó la enfermedad que le llevaría a la tumba. Siguiendo la costumbre de aquellos tiempos, los religiosos de la comunidad se dirigen procesionalmente a la habitación del fraile.

Muere, finalmente en esta ciudad de Lima el 15 de septiembre de 1645.

Su cuerpo es venerado en la Basílica del Rosario.

Fue beatificado, es decir, declarado y ser honrado con culto, por el papa italiano Gregorio XVI en 1813 y canonizado, declarado solemnemente santo, por el papa Pablo VI el 28 de septiembre de 1975.


Gastronomía



Ribera del Fresno ofrece una gastronomía derivada fundamentalmente de los productos típicos de la comarca: vinos de excelente calidad o aceite de oliva virgen extra. De hecho, los vinos de Ribera del Fresno están incluidos dentro de la Denominación de Origen.

Pero es en la comida donde se denota una gran variedad destacando el gazpacho, bacalao en cantina, el escabeche, la caldereta de cordero, la pescadilla, tapas de guarrino, migas, garbanzos guisados con romazas, repápalos de leche, etc.

En cuanto a los dulces típicos de la localidad se subrayan las roscas de candil, las flores, los prestines, los tirabuzones, perrunillas, bizcochos, bollos de Pascua típicos de Semana Santa, coquillos, roscas fritas.                                                                                                                                         


Ruta al Pozo de San Juan Macias



Pozo de San Juan Macías

Partimos desde la plaza de España, en dirección a la C/ Sevilla. Al final de la calle sale una pista asfaltada, y a unos 4 Km hay un monumento a San Juan Macías. Una vez visitado, emprendemos la vuelta por la Vereda de la Tía Juana, en la que podremos visitar un chozo antiguo hecho de piedra. Al final de esta vereda, giramos a la derecha y volvemos a salir a la misma pista por la que fuimos.